Hijo y nieto de carpinteros, Henrique Schreiber heredó de sus antepasados ​​la pasión por la carpintería y la materialización de ideas. Desde entonces ha trabajado en el sector del mueble, presentándose en todos los campos sujetos a interferencias entre las etapas de diseño y producción. Partidario del “hands-on design”, busca en sus proyectos materializar sentimientos, sensaciones y emociones, en respuesta a los deseos y necesidades del usuario, y en equilibrio con la viabilidad comercial y de producción industrial que demanda el mercado.

 

En este contexto, es un defensor del consumo sostenible de recursos y cree en el diseño como herramienta de transformación social, y en la corresponsabilidad del diseñador como transformador de la cultura de consumo.